¿En serio tú sentirías lástima por Los Ancianos que trabajan?
Hace Tiempo yo caminaba con un amigo por una de las calles de mi entonces ciudad de residencia; en nuestro camino se cruzó un "Tamalero", un anciano de aproximadamente 80 años de edad, pregonando por la avenida: "¡Tamales..........Tamales!"
Mi compañero dijo: "A ver espérame, Voy a comprarle un tamal al señor, pobrecito me da lástima......"
¿En verdad se puede sentir lástima por un ser humano así?, Por un señor que trabaja, y trabaja por que tiene valor, porque no quiere sentir lástima de nadie, porque sabe que sólo en el puede confiar y aunque tenga personas que lo apoyen, se niega a la pereza, porque así se lo inculcaron o simplemente porque así es el.
No podemos sentir lástima de la gente que trabaja, que cada día sale a partirse el lomo, por no deberle nada a nadie, por valerse por sí mismo a la edad que sea.
Acepto, puedes estar en desacuerdo con que trabaje a esa edad, puedes estar en desacuerdo con la situación que obliga a esas personas a salir a laborar todos los días sin un apoyo, puedes pensar que no es justo, pero la vida no es justa. Lo que jamás debes hacer es sentir lástima por personas como ellos.
Primero siente lástima por los jóvenes que en lugar de labrarse un futuro salen a robar y/o se drogan, porque no tienen futuro, siente lástima por el político que no sabe hablar, que no sabe gobernar, que roba, que no tiene integridad, que carece de ética. Siente lástima por las personas que no tienen cultura, por aquellos que no saben tolerar, por aquellos que no respetan a nada ni a nadie, a aquellos que no tienen ideales o metas, a aquellos que piensan que con su nuevo dirigente político (de cualquier partido) se resolverán sus problemas, a aquellos que esperan que su vida se resuelva mágicamente como en una telenovela de Azteca o Televisa sin hacer absolutamente nada para resolverla ellos mismos, siente lástima por los policías corruptos, pero aún siente más lástima por el sistema que obliga a estos a serlo, también por los que no saben perder, por los que no pueden resolver sus problemas mediante el diálogo leal y recurren a jugarretas y/o a los golpes, por los que no tienen ganas de vivir, por los que no descubren que sólo tenemos esta oportunidad para vivir y ser felices y que sólo depende de nosotros mismos, de absolutamente nadie más.
Pero sobre todo esto, siente mucha lástima, toda la lástima que puedas por ti mismo cuando sientas lástima por personas como ese viejito tamalero, como aquel anciano que te ofrece un billete de lotería, aquel que vende nieves todos y cada uno de los días cuando tú tienes pereza de levantarte.
Los milagros, si así los quieres llamar, son esas personas a las que alguna vez pudiste ver con lástima o pena.
Ellos son mejores que tú o yo.
Hace Tiempo yo caminaba con un amigo por una de las calles de mi entonces ciudad de residencia; en nuestro camino se cruzó un "Tamalero", un anciano de aproximadamente 80 años de edad, pregonando por la avenida: "¡Tamales..........Tamales!"
Mi compañero dijo: "A ver espérame, Voy a comprarle un tamal al señor, pobrecito me da lástima......"
¿En verdad se puede sentir lástima por un ser humano así?, Por un señor que trabaja, y trabaja por que tiene valor, porque no quiere sentir lástima de nadie, porque sabe que sólo en el puede confiar y aunque tenga personas que lo apoyen, se niega a la pereza, porque así se lo inculcaron o simplemente porque así es el.
No podemos sentir lástima de la gente que trabaja, que cada día sale a partirse el lomo, por no deberle nada a nadie, por valerse por sí mismo a la edad que sea.
Acepto, puedes estar en desacuerdo con que trabaje a esa edad, puedes estar en desacuerdo con la situación que obliga a esas personas a salir a laborar todos los días sin un apoyo, puedes pensar que no es justo, pero la vida no es justa. Lo que jamás debes hacer es sentir lástima por personas como ellos.
Primero siente lástima por los jóvenes que en lugar de labrarse un futuro salen a robar y/o se drogan, porque no tienen futuro, siente lástima por el político que no sabe hablar, que no sabe gobernar, que roba, que no tiene integridad, que carece de ética. Siente lástima por las personas que no tienen cultura, por aquellos que no saben tolerar, por aquellos que no respetan a nada ni a nadie, a aquellos que no tienen ideales o metas, a aquellos que piensan que con su nuevo dirigente político (de cualquier partido) se resolverán sus problemas, a aquellos que esperan que su vida se resuelva mágicamente como en una telenovela de Azteca o Televisa sin hacer absolutamente nada para resolverla ellos mismos, siente lástima por los policías corruptos, pero aún siente más lástima por el sistema que obliga a estos a serlo, también por los que no saben perder, por los que no pueden resolver sus problemas mediante el diálogo leal y recurren a jugarretas y/o a los golpes, por los que no tienen ganas de vivir, por los que no descubren que sólo tenemos esta oportunidad para vivir y ser felices y que sólo depende de nosotros mismos, de absolutamente nadie más.
Pero sobre todo esto, siente mucha lástima, toda la lástima que puedas por ti mismo cuando sientas lástima por personas como ese viejito tamalero, como aquel anciano que te ofrece un billete de lotería, aquel que vende nieves todos y cada uno de los días cuando tú tienes pereza de levantarte.
Los milagros, si así los quieres llamar, son esas personas a las que alguna vez pudiste ver con lástima o pena.
Ellos son mejores que tú o yo.
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